Cada cabala, cada ubicación para ver el partido, todos los nervios a flor de piel que convivieron estas semanas con nosotros, jugaron el mundial. Un error en la cabala podía ser entendida como una derrota... Cada cabala requería técnica, táctica, sacrificio, creatividad y amague a las rutinas que hacían de patadas anti-futboleras...
Llego la perdida, nuestra derrota, todas las cabalas entraron en una inspección despiadada... Los que no miraban para abajo, nos mirábamos entre lágrimas y decíamos ¿Hicimos todo bien?... Buscábamos una respuesta, alguien que nos invente otro partido. El dolor nos dejo paralizados... podemos caer en un nihilismo reactivo, en donde nos dejara de interesar el fútbol y todo a su alrededor (consideramos al fútbol solo como un negocio de mierda). O sino tomamos un postura culpabilizadora, y puteamos a los jugadores, el técnico, los dirigentes, sus hijos, nietos, el presidente, etc... pero eso no nos convence... los jugadores dejaron todo, huevos, garras, belleza, momentos de muy buen fútbol... el técnico es Dios, y la premisa es simple: hay que alentar a marado... hay que alentarlo hasta la muerte... porque yo a Diego lo quiero, porque yo soy un bostero y lo llevo en el corazón. Otra posibilidad es armar un grupo terrorista, conseguir guita de donde sea y tomarnos un Avión a Alemania para cagar a trompadas a todos los hinchas alemanes, los jugadores, y colgar al siete alemán del travesaño... pero es claro que es una salida esquizofrénica y exagerada que profundizara más nuestro dolor.
Quizá lo único que nos quede, es aquello que nos demuestra el fútbol todo el tiempo... vive del dolor... nace de la derrota... no habría posibilidad de semejante amor al fútbol sin la maldita derrota... quien no lloro alguna vez por la pelota, tanto por tristeza, como por la más grande de las felicidades... Los ingredientes del fútbol ya los conocemos, conocemos bien la cara con lágrimas contra el barro... ya sabemos lo que es esperar cuatro años continuamente... y justo en ese momento nace cada Mundial, desde ahí lo comenzamos a jugar, de todo este dolor y bronca que fluirán entre nosotros hasta conseguir la gloria, esa que late en nuestra cien cuando se acerca el partido, esa que ya nos dará un Mundial. Confiemos, de este dolor va nacer nuestro proximo mundial.
Este es un blog que creamos para narrar nuestra experiencia mundialera. Partimos de una certeza: el mundial como acontecimiento global secuestra nuestros estados de ánimo (altera nuestra rutina cotidiana rediseñando los flujos de tiempo que nos ordenan socialmente. Se vuelve prioridad. Todo lo demás queda minimizado; si no nos es posible huir fisicamente de la rutina laboral-social, lo hacemos de manera mental...). Pues bien, en este blog colgaremos los partes diarios de ese secuestro. De esa abducción futbolera. Serán como las cartas desde Honolulu. Comentarios caóticos, o mas reflexivos, nuestros o de los amigos, recortes de diarios o imagenes de publicidades, todo puede colarse. Todo lo que deje la resaca de estas huidas afectivas. Asi como el mundial será la televisión encendida de estos días (las vuvuzelas de los sudafricanos son el zumbido que auspicia de banda sonora)...Este blog auspiciará de libreta de notas futbolera. Estan todos invitados a participar de esta alucinación colectiva (que otra cosa es un mundial?).
Una aclaración: este blog está hecho por varios, siempre la firma es colectiva , pero las posturas probablemente difieran...
Una aclaración: este blog está hecho por varios, siempre la firma es colectiva , pero las posturas probablemente difieran...
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